Artículo publicado en Acción Educativa Revista Pedagógica Nº 123. Enero de 2008.

Recogemos aquí unas orientaciones sobre cómo debe ser la educación de los niños y niñas menores de 6 años. Las palabras hablan por sí solas.

Como decíamos en el número anterior Justa Freire dirigió el Grupo Escolar Alfredo Calderón tras varios años de fecundo trabajo en el Grupo Escolar Cervantes.

Labor del Grupo Escolar Alfredo Calderón

Los cuestionarios que orientan la actividad de los niños menores de seis años.

«El niño, campo fecundo tan mal cultivado hasta el presente, con sus sentidos abiertos y sus facultades razonadoras, esperando siempre a que una mano con arte venga a sacarlos del sueño en que dormitan, es quien tiene en su propia naturaleza la ley según la cual debe educársele. Posee todo lo necesario para ver, primera e ineludible condición del conocimiento; sólo aguarda que le enseñen a hacerlo. Las cosas le son presentes como al hombre educado, y sin embargo, no le hablan lo mismo. Están para él muertas, y hay que darles vida; le son indiferentes y es necesario que lo soliciten; mudas, y deben decirle algo; cerradas y hay que darle la llave para abrirlas; porque ellas no son en sí muertas ni indiferentes, ni mudas; que a todos llaman con el mismo cariño, esperan siempre patentes que la venda le caiga de los ojos para revelarle hasta su fondo íntimo. Las mira, y no le dicen nada, porque no sabe verlas. Dichoso el día en que aprenda y lea en ellas, aunque no sepa leer en los libros».

Don Manuel B. Cossío, «De su jornada», páginas 6 y 7

Del examen y clasificación de los niños anotados en las listas de aspirantes, resultó que había más de un centenar menores de 6 años. De acuerdo con la Inspección admitimos niños desde cuatro años y organizamos tres secciones de unos cuarenta cada una.

Publicamos las notas que orienten la labor con estos niños. Como visión ideal las palabras del Señor Cossío, que encabezan estas líneas. Tomamos el ideal en el sentido que lo define el Señor Ortega: en relación con la vida y no desligado de ella; dependiente del vivir y no con independencia; ennobleciendo la vida siendo parte integrante de la misma. En el epílogo del libro «De Francesca a Beatrice» de V. Ocampo dice: «El ideal es una función vital, un instrumento de la vida entre otros innumerables. Podrán la ética y la estética definir en cada momento qué figuras merecen funcionar como ideales, pero cual sea el ministerio mismo del ideal solo podemos aprenderlo de la biología«. Así la vida adquiere un valor no imaginado hasta el presente. La filosofía moderna ha conquistado para la vida los valores que la antigua filosofía le negó, marcando a los educadores caminos nuevos en su actuación. Antes la vida, nada o casi nada; ahora, la vida cada vida, noblemente vivida, todo.

Los estímulos de la vida… el mundo en torno: el medio. La vida del niño en la escuela cuando comienzan a actuar en un ambiente educador… Nos proponemos la creación del medio educador en el que los niños puedan vivir con plenitud su vida sin ningún fin utilitario «La casa del vivir puro, del vivir sin darse cuenta de la vida, del vivir por vivir».

Don Ángel Llorca

Hemos de actuar con estos niños 5 horas solamente cada día, ya que no está organizado el comedor escolar. Pocas son las horas que los niños viven en la escuela; es necesario que no sean perdidas.

Si pensamos con los más finos pedagogos que los primeros años de la vida marcan en la misma los rasgos esenciales de la personalidad, hemos de pensar cómo debe ser nuestra actuación, en la escuela, en relación con esos niños. Es tarea fina y delicada. No tienen edad para aprender a leer y escribir y sin embargo, puede hacer mucho la escuela en sentido formativo aunque no lo parezca, si consigue: que en el vivir escolar vayan adquiriendo hábitos de orden, de limpieza, de confianza, de respeto, de vida en común, etc., etc., y que vayan interesándose, poco a poco, por el mundo «en torno». Para la adquisición de hábitos y para despertar en el interés en los niños por lo que les rodea, es necesario crear el ambiente educador y colocarlos en él. La actuación en este medio puede ser fundamental para su educación posterior, para su cultura, para su vida entera.